Dolphinz: Aventuras en el zoo marino

Título: Dolphinz: Aventuras en el zoo marino

Año de lanzamiento: 2007

Desarrolladora: Ubisoft

Género: Simulación y Gestión

Plataformas: NDS


¡Muy buenas gente! ¿Qué tal estáis? Bienvenidos a mi blog una vez más, en esta ocasión y para complementar aún más esta semana submarina, os traigo un título marino donde tendremos que cuidar y proteger a distintas especies marinas que han sido dañadas o perjudicadas por la acción humana. A primera vista puede no llamaros mucho la atención, pero es un videojuego muy chulo y muy concienciado con la vida de la fauna marina. Si queréis saber alguna cosilla más os animo a seguir leyendo. ¡Viva los animales y viva el océano!

Dolphinz: Aventuras en el zoo marino nos cuenta una pequeña historia donde dos hermanos son enviados a una isla para trabajar en verano. El tío de estos hermanos posee un zoo que está a punto de inaugurar, y sus padres les han mandado a ayudar. La inauguración es en poco tiempo y aún no hay animales que exhibir ni una correcta limpieza y organización. La idea de exhibir animales y privarles de su libertad es una idea que a los hermanos (Greg y Mila) no les agrada en absoluto y, tras una conversación por sus derechos, se decide utilizar el parque para curar, proteger y salvar especies heridas, enfermas o desorientadas hasta que estén de nuevo en condiciones de volver al mar. Para ello, los dos hermanos deberán trabajar para poder conseguir que todos y cada uno de los animales se encuentran con todas las fuerzas que necesitan. ¿Es un gran trabajo y una idea fantástica verdad?

Entrada al parque de cuidado de especies marinas

La jugabilidad es sencilla. Todo se gestiona y realiza con el lápiz en la pantalla táctil de la NDS. Podremos desplazarnos por toda la isla y el parque y, clickando en la piscina que deseemos, podremos dar de comer, curar, limpiar e incluso observar bajo el agua a las distintas especies que se encuentran allí. Deberemos hacer un buen trabajo de mantenimiento y cuidados si queremos salvar y poder cuidar a más especies.

Visualmente se plantea bajo una vista cenital. En los videojuegos de gestión y estrategia, es una vista fantástica ya que te proporciona una vista amplia y global de todo lo que tienes a tu disposición. La vista cambia a primera persona en los espectáculos o en la observación bajo el agua, y adquiere un zoom al seleccionar edificios o una especie en concreto. Los diseños de animales y la ambientación están bastante bien para ser un título muy desconocido, de baja resolución y de hace casi 13 años.

Mila intentando acercar a un delfín para poder curarle las heridas

Greg dando de comer, en este caso, en la piscina de los delfines

Musicalmente es un apartado decente. Las melodías en la isla están bien y acompañan perfecto, pero son algo flojillas. Este título resalta más por los sonidos de los animales que por las propias melodías. Amenizan la partida y te acompañan en cada movimiento pero poco más. Aún así no lo considero un mal apartado, solo que podría haber sido un poquito más potente.

Por último deciros que en Dolphinz: Aventuras en el zoo marino iremos descubriendo nuevas y mejores cosas a raíz de completar misiones. La historia principal se va desarrollando y subdesarrollando a medida que vamos avanzando, y eso nos premia con nuevas misiones y nuevas funciones que poder llevar a cabo en el parque. Si te gusta la estética y la fauna marina es un gran videojuego que no puedes perderte. Un gran compañero si puedes jugar un ratillo antes de acostarte.

PD: Creo que nunca había hecho una pregunta tan extraña pero... ¿Cambiarías tu trabajo por poder trabajar cuidando y preservando las especies en peligro de extinción, enfermas o heridas en un establecimiento como este?

Yo sí que lo cambiaba, de cabeza además. Me encantaría tener un centro donde poder proteger, cuidar y salvar especies tanto marinas, como terrestres o aéreas. Hacerlas un buen seguimiento y, cuando estuviesen en buenas condiciones y sanas, devolverlas a su hogar y ver como vuelven a vivir felices, sin ataduras y el completa libertad. Proteger sus hábitats y sus vidas en un trabajo que empieza dentro de cada uno de nosotros. No solo con los animales marinos, sino con todas y cada una de las especies sobre la faz de la Tierra. Desde la más pequeña hasta la más grande. Todos merecen vivir igual o más que nosotros. Ellos son los dueños de este mundo y NO nosotros, no lo olvidéis nunca.

Un saludo a todos y nos vemos en la siguiente publicación, haaaaasta luegooooo.